¿Va a suceder otra vez? Los casos de supergripe H3N2 en México y el mundo encendieron las alarmas por el riesgo y temor de vivir una nueva pandemia como la del COVID-19.
Sin embargo, el doctor Alejandro Macías descartó que el virus H3N2 se convierta en una epidemia de este tipo y, en cambio, refirió que sus características son las de un brote de influenza estacional.
“En lugar de llamarle supergripe podría ser superinfluenza y hay que hacer varias aclaraciones, en primera recordar que la influenza se puede presentar en dos tipos, las pandemias o epidemias y las estacionales”, explicó el médico a través de su canal de YouTube.
El doctor Macías detalló que se trata de un virus estacional, pero alertó que sí tiene mutaciones.
“Es virus de influenza estacional, no será pandemia. Es preocupante porque aunque sus características son similares al de la estación pasada, tiene al menos 7 mutaciones sobre los virus que circularon el año pasado”, detalló.
El infectólogo agregó que el brote de influenza junto con la mutación de sus características ocasionarán contagios más frecuentes y severos, así como la posible saturación de los servicios de salud, pero también resaltó las diferencias entre estos contagios y una pandemia.
“Para que haya una pandemia se necesita que el virus sea completamente nuevo y que nadie tenga una buena inmunidad contra él y se infecte mucha gente al mismo tiempo, por lo que se colapsan los servicios de salud”, dijo.
Dicho virus ocasionó una epidemia que inició en Hong Kong en 1968 y ahora por su rápida propagación se han detectado casos en Japón, Reino Unidos, España, Alemania, Francia, Italia, Estados Unidos y Canadá.
Alejandro Macías aseguró que ahora solo se adelantó la estación de influenza, pero que los meses de mayores infecciones serían durante enero y febrero.
La recomendación principal del epidemiólogo es vacunarse contra la influenza estacional, pero advirtió que esto no evitaría por completo los contagios, sino que solo ayudaría a presentar síntomas leves.
El doctor Macías urgió en la aplicación de la vacuna lo más pronto posible debido a que sus efectos de protección son hasta dos o tres semanas después de la aplicación.
Además de la vacunación, las medidas de prevención principales son:
En caso de presentar algún síntoma respiratorio, también se pide acudir a los centros de salud para recibir atención médica oportuna.


